Mi historia



Desde muy pequeña aprendí que el esfuerzo y el trabajo personal debían estar alineados con los principios y valores propicios, a esto le llamo yo coherencia. Es esta, quizás, la más valiosa herencia recibida de mi familia, de mis padres, de mis orígenes. Con esta fuerza primordial, no solo he abordado mi vida, sino también la de mi familia, mis hijos y mi marido. Aunque no niego que en muchas ocasiones, me ha acarreado algunos problemas. Creo, que ese ha sido siempre y sigue siendo el mejor camino.


Por motivos laborales, personales y familiares, he viajado y tenido la oportunidad de conocer lugares diversos. En todos ellos la práctica del voluntariado, me ha ayudado, no sólo a integrarme en distintos ambientes sociales, sino también a sentirme satisfecha y a encontrar sentido a mi vida, sintiéndome útil, buscando esa coherencia. A través de esta experiencia interpersonal, decido dar un giro a mi vida laboral y encaminarme hacia lo que yo subrayo como "la llamada de la vida". Vivir mi vida al lado de personas con experiencias vitales intensas, que en muchos momentos hasta entonces, habían sido ajenas para mi. Aprendiendo de sus experiencias, de sus recorridos existenciales, de sus fracasos, de su dolor y deseos, soy testigo y comparto con cada una de esas personas, desde el ejercicio de mi profesión, el acto heroico de caer y levantarse, con más fuerza si cabe cada día.


Dediqué veinte años de mi vida a trabajar con personas adictas, en su proceso de rehabilitación. Pude acompañarles/as en ese proceso al igual que a sus familias, ayudándoles a encontrar el camino para volver a configurar sus vidas y recuperar el sentido y la motivación perdidas.


Por ello me comprometí con la formación y capacitación profesional , que me ha llevado y sigo en ello.. a fundamentar y dotar de recursos y herramientas, mi compromiso con la atención a las personas desde la excelencia y el rigor profesional. Desde aquí es desde donde he logrado sentirme plenamente coherente.


Con los años, fruto de mi propio camino, he creado un proyecto fascinante, que me permite seguir llevando a cabo mi labor. Es un espacio vivo, dinámico, abierto y en constante cambio y evolución. Cada persona que acude, se convierte en protagonista de su propia transformación.


Me permite además, crear con otras personas, equipos de trabajo multidisciplinares. Son fantásticas estas experiencias, en las cuales poder seguir generando nuevos proyectos, atendiendo nuevas necesidades y por supuesto seguir disfrutando del camino.


Todos estos espacios me siguen dando cada día la oportunidad de maravillarme con la capacidad que todas y cada una de las personas tenemos , de volver a creer en nosotros mismos, de renacer y de encontrar nuestro equilibrio en este asunto tan complicado que resulta, a veces el vivir.


A veces lo humano, está tan cerca de nosotros,


que olvidamos que realmente existe.

Mi historia

Lo aprendido

Prefiero ser aprendiz a ser una experta

Tengo una disposición vital de descubrir y conocer, en constante búsqueda. No digo que no a una buena propuesta o a un buen reto. Creo que es allí donde más aprendo.

La determinación es mi mejor compañera

Quienes me conocen, saben que tengo un paso firme y directo. He aprendido a ver en las dificultades forman parte de los objetivos y del camino que tenemos que recorrer para alcanzarlos .. o no… a veces, aún con trabajo y determinación, las cosas no salen y ahí también se aprende.

La buena actitud

Me ha ayudado a aceptar en mi vida el cambio. A convivir con lo imprevisto y a reconocer mis errores. Reconciliarme con las personas o situaciones vividas , que con la perspectiva del tiempo valoro de manera distinta. Creo que somos lo que hacemos con lo que nos sucede.



Estar para mí y así poder estar para los demás

Tenemos responsabilidad en cómo decidimos vivir nuestra vida y en el efecto que esto tiene en otras personas. Es necesario aceptar esa responsabilidad para poder SER y ESTAR.